Por el Pastor Carlos Cancino Campos
“pero la gente nace para tener problemas tan cierto como que las chispas vuelan del fuego.” — Job 5:7
Todo hombre nace en un mundo de aflicción. En un determinado momento, todos enfrentamos el sufrimiento, en mayor o menor grado. Por eso debemos saber cómo hacerle frente. Job enfrentó todo tipo de sufrimiento: enfermedad, pobreza, soledad, muerte de su familia. A pesar de esto, no fue él quien enfrentó la mayor prueba, sino Abraham.
“Tiempo después, Dios probó la fe de Abraham. —¡Abraham! —lo llamó Dios. —Sí —respondió él—, aquí estoy. —Toma a tu hijo, tu único hijo —sí, a Isaac, a quien tanto amas— y vete a la tierra de Moriah. Allí lo sacrificarás como ofrenda quemada sobre uno de los montes, uno que yo te mostraré.” — Génesis 22:1-2
Esto no tenía precedente, porque Dios nunca había pedido un sacrificio humano. Hacer esto es todo lo contrario a lo que Abraham sabía De Dios. Isaac era el hijo de la promesa. Lo difícil no es que muera, sino que Abraham debía matarlo
“«Quédense aquí con el burro —dijo Abraham a los siervos—. El muchacho y yo seguiremos un poco más adelante. Allí adoraremos y volveremos enseguida». Entonces Abraham puso la leña para la ofrenda sobre los hombros de Isaac, mientras que él llevó el fuego y el cuchillo. Mientras caminaban juntos, Isaac se dio vuelta y le dijo a Abraham: —¿Padre? —Sí, hijo mío —contestó Abraham. —Tenemos el fuego y la leña —dijo el muchacho—, ¿pero dónde está el cordero para la ofrenda quemada? —Dios proveerá un cordero para la ofrenda quemada, hijo mío —contestó Abraham. Así que ambos siguieron caminando juntos.” — Génesis 22:5-8
Pese a lo extraño y fuerte de la petición, Abraham obedece de forma inmediata, demostrando así una fe inquebrantable. Además de Cristo, Abraham es el único en ejemplo de fe, sumisión y obediencia ; a cualquier precio.
«Entonces Abraham Cuando llegaron al lugar indicado por Dios, Abraham construyó un altar y colocó la leña encima. Luego ató a su hijo Isaac, y lo puso sobre el altar, encima de la leña. Y Abraham tomó el cuchillo para matar a su hijo en sacrificio. En ese momento, el ángel del Señor lo llamó desde el cielo: —¡Abraham! ¡Abraham! —Sí —respondió Abraham—, ¡aquí estoy! —¡No pongas tu mano sobre el muchacho! —dijo el ángel—. No le hagas ningún daño, porque ahora sé que de verdad temes a Dios. No me has negado ni siquiera a tu hijo, tu único hijo.” — Génesis 22:10-12-
Abraham rindió su obediencia a la voluntad De Dios, porque estaba listo a hacer cualquier cosa que él le pidiera. Hasta donde llega nuestra fe. Porque todos podemos hablar, pero cumplir y hacer es otra cosa.
En el libro de hebreos queda aún más clara la fe de Abraham, confiaba en que Dios para cumplir su palabra era capaz de resucitar a Isaac.
“Fue por la fe que Abraham ofreció a Isaac en sacrificio cuando Dios lo puso a prueba. Abraham, quien había recibido las promesas de Dios, estuvo dispuesto a sacrificar a su único hijo, Isaac, aun cuando Dios le había dicho: «Isaac es el hijo mediante el cual procederán tus descendientes». Abraham llegó a la conclusión de que si Isaac moría, Dios tenía el poder para volverlo a la vida; y en cierto sentido, Abraham recibió de vuelta a su hijo de entre los muertos. Fue por la fe que Isaac prometió a sus hijos, Jacob y Esaú, bendiciones para el futuro.” — Hebreos 11:17-20
Si toda persona atraviesa una prueba, confiando en Dios, podrá lograrlo. Dios nos permitirá atravesar pruebas y lo único que nos sostendrá al atravesarlo, será la fe. La palabra dice, que en esta tierra nunca nos libraremos de las pruebas.
Todos enfrentaremos situaciones complejas
Jesús nos advirtió sobre el sufrimiento y las pruebas que tendríamos “ en el mundo tendréis aflicción” Dios no tiene hijos sin cruz, triunfaremos sobre las pruebas con la presencia De Dios.
1.- Las pruebas verifican la fortaleza de nuestra
De qué calidad es. Dios conoce nuestro corazón, pero nos hace atravesar por pruebas, para que nosotros lo conozcamos. Para mostrarnos la debilidad o fortaleza de nuestra fe. Las pruebas nos ayudan a revisar nuestra fe y cuánto más fuerte sea esta, mayores son las probabilidades de ser útil para Dios.
2.- Las pruebas nos humillan
Nos recuerdan que no debemos tener una imagen demasiado alta de nuestra fortaleza espiritual. Después Jesús, solo el apóstol Pablo tiene el mayor grado de revelación. Dios le cambia el nombre de Saulo ( el más alto) a Pablo, pequeño. Dios permite las pruebas para mantenernos humildes, para que evitemos que confiemos en nuestra fortaleza espiritual.
3.- Las proezas nos alejan de las cosas materiales
Mientras más vivimos más acumulamos A veces cuando se es prosperado, se deposita la felicidad en eso.
4.- Las pruebas nos llaman a esperanza eterna
Crean un desinterés creciente por este mundo pasajero. Fijan nuestras expectativas en cosas superiores que las terrenales.
5.- Las pruebas revelan lo que en realidad amamos
Al pedirle sacrificar a su hijo, Dios quería revelar si Abraham lo amaba más a él o a su hijo. Nos poner a prueba para demostrar si lo amamos de la forma en que decimos amarle.
6.- Las pruebas nos enseñan a valorar las bendiciones De Dios
El mundo sin Cristo nos dice que vivamos y aprovechemos esta vida porque no hay otra. En cambio la palabra nos habla de bendición en la obediencia.
7.- Las pruebas generan fortaleza
Mientras se está tranquilo, no se vive por fe. Pero Cuando vienen situaciones complejas la fe se fortalece. Las pruebas siempre existirán hasta que Cristo venga. Cristo está con nosotros y no dejará a su iglesia. Toda prueba De Dios se transforma en bendición