Por el Pastor Carlos Cancino
En el corazón del hombre; siempre está el deseo de reconocimiento. Esto ocurre en todos hombres y mujeres.
Ser reconocidos como únicos, “ser alguien” y no pasar desapercibidos. Muchos de los problemas de la sociedad, son justamente por esto. Por esta razón muchos buscan la fama, en distintas áreas ( tv, política, artes, etc )
“Entonces dijeron: «Vamos, construyamos una gran ciudad para nosotros con una torre que llegue hasta el cielo. Eso nos hará famosos y evitará que nos dispersemos por todo el mundo».” — Génesis 11:4
Cuando Dios escucha al hombre en Babel, diciendo esto. A Dios en los cielos no le pareció bien . Por eso entorpece sus planes. Según el texto bíblico, aquí surgieron los idiomas. Cambiando el idioma de quienes lo construían, no pudieron entenderse y la obra se detuvo y abandonó el lugar. Se fueron en distintas direcciones.
El que ideó esto
“Cus también fue antepasado de Nimrod, el primer guerrero heroico de la tierra. Ya que Nimrod fue el mejor cazador del mundo, su nombre llegó a ser proverbial; la gente decía: «Este hombre es como Nimrod, el mejor cazador del mundo». Él construyó su reino en la tierra de Babilonia, con las ciudades de Babel, Erec, Acad y Calne. Desde allí extendió su territorio a Asiria y construyó las ciudades de Nínive, Rehobot-ir, Cala, y Resén (la gran ciudad situada entre Nínive y Cala).” — Génesis 10:8-12
Nimrod tiene importancia, porque toda religión falsa tiene su origen en el corazón de este hombre.
1) Nimrod ( rebelde) fue el primero en establecerse como héroe 2) Fue el primer poderoso sobre la tierra, es el primer tirano 3) Vigoroso cazador. Protegía a las ciudades de las bestias . Fue nieto de Noe, porque en ese tiempo habían muchos animales, más que personas 4) vigoroso cazador, en contra De Dios, en oposición a Dios 5) fue el comienzo de su reino Babel 6) está tierra fue conocida como la tierra de Caldea 7) Nimrod edificó Ninive.
El fundador de los imperios babilónicos y asirios fue Nimrod: “ Fue Nimrod quien incitó a los hombres a desobedecer a Dios, confiar en las fuerzas humanas y no en Dios.”
Dios puede darnos un nombre
Sin embargo, Dios puede darnos un nombre y no, nosotros mismos. Como fue el caso de Abram, a quien invita a tener un cambio de vida y tener esperanza en el Dios vivo. Luego le da un nombre nuevo Abraham, lo mismo ocurre con su esposa.
Jacob, nieto de Abraham, su nombre significa usurpador; pero luego pelea con Dios, para que lo bendiga, transformándose en el primer convertido. En ese momento su nombre su cambiado a Israel porque peleó con Dios y venció. Después María, fue bendecida, cuando le dice que será madre y su hijo se llamará Emanuel.
En esta época muchos buscan el éxito, ( carreras, dinero, renombre). Muchos atribuyen el éxito aúna bendición de Dios, pero cuando esto nos aparta De Dios, se transforma en una maldición.
Muchos han negado a Dios y “se han hecho un nombre” pero si mueren hoy, se van al infierno. Que saca una persona ganarlo todo, ( fama, dinero. Admiración) si pierde su alma. Todo lo que el mundo ofrece es temporal
Un pensamiento muy antiguo
Este pensamiento de obtener fama y reconocimiento es muy antiguo : satanás, adán y Eva, Nimrod
“»¡Cómo has caído del cielo, oh estrella luciente, hijo de la mañana! Has sido arrojado a la tierra, tú que destruías a las naciones del mundo. Pues te decías a ti mismo: “Subiré al cielo para poner mi trono por encima de las estrellas de Dios. Voy a presidir en el monte de los dioses, muy lejos en el norte.” — Isaías 14:12-13
Nombre sobre todo nombre
Pero hubo un ser que bajó desde lo más alto, hasta lo más bajo. Jesucristo bajó desde la eternidad, no para hacerse un nombre, sino para que el Padre eterno le dé un nombre.
“Tengan la misma actitud que tuvo Cristo Jesús. Aunque era Dios, no consideró que el ser igual a Dios fuera algo a lo cual aferrarse. En cambio, renunció a sus privilegios divinos; adoptó la humilde posición de un esclavo y nació como un ser humano. Cuando apareció en forma de hombre, se humilló a sí mismo en obediencia a Dios y murió en una cruz como morían los criminales. Por lo tanto, Dios lo elevó al lugar de máximo honor y le dio el nombre que está por encima de todos los demás nombres” — Filipenses 2:5-9
Jesús recibió un nombre del Padre , es el nombre de Jesús que hace temblar el infierno, mueve todos los cimientos, su nombre sana todo lo que está destruido.
No hace falta que busquemos hacernos un nombre, no hace falta buscar reconocimiento, la búsqueda de la fama, está destinada al Fracaso. Dios conoce nuestra individualidad, y es quien le da el valor. Solo él nos conoce mejor que nosotros mismos. Dios no tiene hijos anónimos, porque si somos sus hijos no lo somos. Por cada hijo De Dios que se salva, hay fiesta en los cielos. Dios nos ha dado un nombre, con un propósito. Estemos tranquilos, no busquemos levantarnos a nosotros mismos, esperemos que Dios nos dé un nombre.
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